Hoy viene a tomar el té... Sara Morante

1.- ¿Por qué te gusta leer?

Porque vivo otras vidas, visito lugares y conozco a gente.

2.- ¿Recuerdas cuál fue el primer libro que leíste?
Seguramente fue un tebeo de Mortadelo y Filemón, o un cuento de Teo. Aunque mi madre suele recordarme que yo de pequeña me resistía a aprender a leer, decía que con los dibujos tenía suficiente para saber “de qué iba la historia”.

3.- ¿Cuál es tu libro favorito?

Es imposible decir uno. Cada libro se corresponde a un momento de mi vida en el que su lectura fue importante o sorprendente. “Rue de l'Odéon” de Adrienne Monnier, me encanta, y siempre vuelvo a esa librería. “La conjura de los necios”, de John Kennedy Toole, en su momento me maravilló. En la adolescencia leí los diarios de Anaïs Nin, Henry Miller y mucho Delibes y Sender. Cualquiera de Marguerite Duras, en cualquier momento, porque me da igual lo que me cuente siempre y cuando lo haga con esa voz seca y extraña. “Madrid 1940” de Umbral me frió el cerebro, el “Nada” de Laforet me tuvo en vilo un día entero, leyendo en la cama y sin moverme de ahí. Hay muchos libros.

4.- ¿Y tu momento favorito para leer?
No es el favorito, ni el lugar es el más cómodo, pero justo antes de irme a la cama, cuando todo el mundo duerme en casa, voy a la cocina, enciendo un pitillo y leo sentada junto a la mesa, y cuando me doy cuenta ya es de madrugada, tengo frío y la silla es incómoda.

5.- Descríbenos tu rincón de lectura.
La cocina, claro. Aunque me encantaría decir que leo en el sofá, que es mucho más cómodo.

6.- ¿Nos recomiendas un libro infantil?
“Vania el forzudo”, de Otfried Preussler.  No sé cuántas veces lo leí, ni cuántas pipas comí leyéndolo.
Y he de decir otro, “La hija del espantapájaros”, de María Gripe. Era de mi hermana mayor y me maravilló. Lo recuerdo aún con esa sensación. Y todo lo de Enid Blyton.

Bio-Bibliografía

Sara Morante (1976) estudió Artes aplicadas en España e Irlanda. Recibió el Premio Nacional de Arte Joven, categoría ilustración, del Gobierno de Cantabria en el año 2008. Ha ilustrado textos entre los que destacan el Diccionario de literatura para esnobs, de Fabrice Gaignault, Los zapatos rojos de H.C. Andersen, La flor roja de Vsévolod Garshín, Los Watson de Jane Austen, el relato Xingú de Edith Wharton o el poemario Señal de Raúl Vacas. La vida de las paredes en su primera novela como escritora además de ilustradora.